GUZZI presenta las nuevas V7
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La marca de Mandello del Lario nos trae la última versión de sus V7, puro espíritu Cafe Racer y sabor de los 70. (Sigue Leyendo)
La Guzzi V7 está claramente está inspirada en las motos de los años 70, justo antes de que dieran el “estirón” y empezaran los conceptos “Maxi”.
Su inconfundible tanque de combustible de 22 litros, hecho de metal, es la guinda de un hierro que bebe de las fuentes del pasado en el plano estético, numerosos detalles como las colas del tipo “cigar-shaped” y el asiento plano completan esta ambientación añeja.
No obstante la V7 está puesta al día en el plano tecnológico. La marca anuncia consumos de 4 litros a los 100 y revisiones a los 10.000 kilómetros. Ofreciendo una moto para todos los días con bajos consumos y mantenimiento reducido, pero con un estilo y personalidad de otros tiempos.
Guzzi considera consolidada su producción en la factoría de Mandello del Lario debido al buen ritmo de ventas conseguido hasta ahora.
Sobre un bastidor de doble cuna monta su tradicional motor transversal en V a 90º de 744 cc y una transmisión del tipo cardan, pudiendo elegir tres modelos: Stone, Special o Racer.
La Stone tiene el acabado con menos alardes, es la que tiene el estilo más minimalista.
En la Special se introducen acabados en dos colores a imitación de las V750 S3, aquellas que montaban por primera vez frenos de disco.
Para la Racer se ha dejado el mayor alarde decorativo, aunque ya es conocida desde hace unos años no deja de sorprender, una moto que siempre llama la atención.
Técnicamente las tres son iguales en lo referente al motor, con algunos cambios en las versiones actuales, como las tapas de los cilindros, intentando ofrecer una imagen más compacta y elegante, quizás perdiendo parte de su sabor añejo. Como principal novedad un nuevo volante de inercia húmedo reemplaza al sistema seco anterior.
V7 STONE
Se recurre al negro mate en las pinturas negras de guardabarros y otros elementos ornamentales, mientras que el depósito de gasolina puedes elegirlo en un rojo que denominan “Rosso Corposo”, en un verde mate que los italianos llaman “Verde Agata” o en negro, también mate, que bautizan como “Nero Ruvido”.
Guzzi recalca esta es la versión más urbana, con detalles como unas llantas más ligeras, rebajando el peso de las que montan sus hermanas 1440 gramos en la llanta delantera y 860 en la trasera, esto lo consigue al ser de aleación y no de radios.
Para la protección de la horquilla recurre a unos fuelles de goma.
V7 SPECIAL
En este caso se ha buscado respetar al máximo posible el espíritu de sus ancestros de los 70, como la V750 S3 de 1974, la que ya dijimos que fue la primera en montar frenos de disco. La Special tiene dos versiones bicolor: plata metálico con franjas negras o en negro con franjas naranjas, reproduciéndose fielmente la combinación de colores del modelo de 1974.
Las llantas son de radios con el aro lacado en negro, en esta ocasión la horquilla se cubre con protectores rígidos.
V7 RACER
Llega la tercera edición de este modelo cafetero, como en las dos anteriores lo hace de manera limitada y numerada como se indica con una plaquita en el cuadro de instrumentos.
La Racer es un canto al detalle, empezando por su depósito cromado, siguiendo con el nº 7 en el cupulino y el colín, para que no decaiga se ha pintado en rojo el chasis, el basculante y los bujes. El asiento marrón está confeccionado en piel de imitación y alcántara, el cinturón que hay en la parte superior del depósito es de cuero.
Las llantas son de radios con el aro en negro mate y el nombre de la marca en letras rojas, como ya se hace en la California Custom.
Las tapas laterales que hay debajo del asiento son de aluminio y están perforados, los estribos se han confeccionado partiendo de una pieza maciza que se ha mecanizado. La horquilla se protege con fuelles de goma y el manillar es corto y bajo, muy Cafe Racer.
Los amortiguadores WMY01 tienen precarga de muelle y son ajustables en extensión y compresión, gracias a un ajuste de 12 click.
Personalmente nos sigue pareciendo una pena que no disponga de más potencia, por lo menos en esta versión, los 48 CV se nos hacen escasos.
Pura elegancia para esta monoplaza Cafe Racer.