Los Metzeler Karoo 4 y la BMW R 1300 GS de 0 a 6000 metros de altura en menos de 24 horas
BMW Motorrad- El escenario de la expedición, que representó un desafío extremo para motocicletas, neumáticos y motociclistas, fue El Circuito de los Seis Miles, en el desierto de Atacama, Chile, la cadena de los volcanes activos más altos del mundo, entre ellos el Nevado Ojos del Salado y el Nevado de Incahuasi. Motos y neumáticos de serie para un reto extremo. Un equipo que representaba a la marca Metzeler y a BMW Motorrad, con una flota de BMW R 1300 GS equipadas con neumáticos Metzeler Karoo 4, alcanzó y superó los 6000 metros sobre el nivel del mar. Todo esto en menos de 24 horas. Un ascenso muy difícil para motoristas, motos y neumáticos, pero el objetivo se logró en la desafiante Cara Norte del Nevado Ojos del Salado donde la expedición alcanzó una altitud de 6006 metros en solo 19 horas y 22 minutos, y luego alcanzó la altitud máxima de 6027 metros.
La expedición incluyó un sendero de aclimatación ascendiendo progresivamente hasta el Circuito de los Seis Miles, en las faldas del Nevado Ojos del Salado, ubicado exactamente en la frontera entre Argentina y Chile y que con sus 6891 metros es el volcán activo más alto del mundo, junto a su gemelo, el Nevado de Incahuasi de 6610 metros de altura. La BMW R 1300 GS equipada con neumáticos Metzeler Karoo 4 descendió a continuación hasta el nivel del mar a orillas del Océano Pacífico, en Bahía Inglesa, para salir a las 15:00 horas local del 6 de diciembre para cruzar el desierto de Atacama y llegar al Nevado Ojos Del Salado, logrando superar los 6000 metros de altitud en menos de 24 horas. El objetivo de esta misión fue alcanzado a las 10:22 horas del 7 de diciembre.
Los pilotos que llevaron la BMW R 1300 GS, completamente estándar, con neumáticos Metzeler Karoo 4 fueron Salvatore Pennisi, Director de Pruebas y Relaciones Técnicas de Metzeler, Christof Lischka, Jefe de Desarrollo de BMW Motorrad, Michele Pradelli, campeón italiano de enduro extremo y probador de la revista italiana InMoto, y Karsten Schwers, probador y periodista de la revista alemana Motorrad.
Salvatore Pennisi, Director de Pruebas y Relaciones Técnicas de Metzeler, dijo: "Esta hazaña nos ha permitido confirmar la sólida relación entre Metzeler y BMW Motorrad, pero sobre todo demostrar el valor de dos productos estrictamente estándar que cualquiera puede comprar y usar incluso en las condiciones más difíciles, con la mayor seguridad posible. La subida a los 6000 metros fue muy dura, especialmente para nuestro equipo que tuvo que seguir una exigente preparación física antes de subirse a la moto. Así que, antes de expresar nuestra satisfacción con la eficacia mostrada de nuestros neumáticos, hay que felicitar a los pilotos".
La nueva BMW R 1300 GS , en los medidas 120/70 R19 delante y 170/60 R17 detrás, utiliza neumáticos Metzeler Tourance Next 2 como equipo original en todas las versiones, mientras que los Metzeler Karoo 4 se ofrecen como equipamiento opcional para uso off-road. Con los neumáticos Metzeler Karoo 4, la BMW R 1300 GS ofrece un excelente rendimiento de conducción en el uso todoterreno y en la búsqueda de aventuras.
De hecho, estos neumáticos, creados para ser polivalentes, son capaces de ofrecer una tracción ejemplar fuera de la carretera, desde la arena o las pistas desérticas hasta el barro más profundo, al tiempo que garantizan una excelente resistencia a la abrasión, los cortes y los desgarros tan frecuentes en el uso off-road. Todo ello unido a una excelente conducción en asfalto, y un gran rendimiento en mojado gracias también a la capacidad de interactuar en perfecta sinergia con los avanzados sistemas de asistencia a la conducción de la BMW R 1300 GS. Una peculiaridad de la expedición fue, de hecho, la decisión de afrontarla con motocicletas y neumáticos estándar, contando con la certeza de un rendimiento combinado de referencia. Cabe destacar, entre otras cosas, que este resultado se ha conseguido con medidas de 19 pulgadas en la parte delantera y 17 pulgadas en la parte trasera, lo que abre una nueva era en el mundo de aventura.
Un reto extremo tanto desde el punto de vista tecnológico como humano. De hecho, el Nevado Ojos del Salado sometió a motocicletas, neumáticos y pilotos a una prueba muy dura en condiciones extremas, a más de cinco mil metros de altura, con temperaturas muy frías y en condiciones de presión atmosférica reducida, elementos todos ellos que requerían una perfecta gestión electrónica de las relaciones estequiométricas, así como una fiabilidad total de cada componente de la motocicleta. Los neumáticos Metzeler, por su parte, tuvieron que atravesar todo tipo de terrenos, terrenos pedregosos, caminos de tierra, interminables extensiones desérticas de arena y con la incógnita de encontrar nieve y hielo en la ruta.
Los participantes en la expedición también tuvieron que hacer un esfuerzo físico y mental considerable. No solo porque la ascensión, que partió de Bahía Inglesa, un lugar ubicado cerca del puerto de Caldera en el Océano Pacífico, en la región de Atacama, se completó en menos de 24 horas, lo que requirió una estimación cuidadosa y una aclimatación agotadora en los diversos campamentos base a diferentes altitudes en los días previos a la hazaña antes de descender nuevamente al nivel del mar para la salida. A más de 5.000 metros entras en un entorno inhóspito. Las temperaturas son muy bajas, alrededor de los -10° C durante el día con percepciones que podrían llegar a los -20° C y el oxígeno reducido.
La preparación de los participantes en la expedición se cuidó con la máxima atención: todos los que conducían las motocicletas se sometieron a exámenes específicos y controles médicos en la Universidad Kore de Enna, en colaboración con la Autoridad Sanitaria Provincial de Enna. También en Sicilia, se llevó a cabo una simulación de la hazaña que tuvo como telón de fondo el Etna, el volcán activo más alto de Europa.