Valkiria de Deus Ex Machina
Constructores- La limpieza de líneas y el acabado minimalista sigue siendo la imagen de un constructor que es el clásico de los clásicos, si no es el más famoso es de los más extendidos a nivel mundial, hasta un punto que ya le pasa como a Los Ramones: su merchandising se ve por todos lados, hasta el punto de que hay gente que lleva sus gorras y camisetas sin tan siquiera saber qué hacen los tal Deus Ex Machina.
La moto que te traemos hoy cumple con los cánones más puros de Deus Ex Machina, la Valkiria, una Yamaha SR que amenazaba ruina y con 45 años a cuestas se ha montado un kit de gran calibre 535, Keihin FCR39 y escape estilo TT.
El asiento de café racer está tapizado en cuero marrón y es obra de Bad Arse Trim co, para ser el complemento ideal a los elementos de la carrocería se ha montado un sutil guardabarros delantero de acero inoxidable.
Una café racer además de parecerlo debe serlo, por ello se han montado unos semimanillares deportivos pero muy vintage y se han retrasado las estriberas, de esta manera te has asegurado que llevas las manos para delante y los pies bien detrás.
Pero el comportamiento dinámico de una buena café racer no tiene su punto álgido en las carrereteras en línea recta, son las curvas donde un hierro así debe serpentear, si no de manera efectiva, al menos de manera divertida, para ello la Valkiria cuenta con unas armas para que su cabalgata sea tan apoteósica como nos propuso Wagner: un juego de amortiguadores YSS, un kit de válvulas PD para que la SR se pegue al suelo, mientras que un kit de frenos Brembo hace que la frenada sea de una mordiente digna.
Para completar el conjunto unos intermitentes Kellermann Atto, un interruptor de botón Motone 2 y un mini interruptor en el manillar con cableado interno. Además de una comodidad de la que no disponía la SR original: un kit de arranque eléctrico cortesía de Nuts And Bolts France. La guinda del pastel es la pintura verde esmeralda metálica para adornar el tanque, el guardabarros y ese cupolino que si no te tiene enamorado no entiendo cómo has llegado hasta el final de este artículo sobre esta peculiar motocicleta.
Las fotografías son de Chris Grundy