Aleix Espargaró espera estar listo para Assen

MotoGP- Aleix Espargaró ya respira tranquilo. Su imagen ingresando en el box bañado en lágrimas tras verse obligado a abandonar en la carrera en casa, ante su gente, hizo temer lo peor. Especialmente, al ver que el piloto de Granollers era evacuado en camilla a un centro médico.
El primer balance médico, compartido por el propio piloto, hablaba de un edema óseo, pero este lunes, tras un nuevo chequeo, el mayor de los Espargaró pudo conocer, por fin, un alcance más exacto de la lesión sufrida en Montmeló. Aleix sufrió en su pierna izquierda, según informó Aprilia, una microfractura en el fémur y una lesión en la tibia. El comunicado, además, añade que "por el momento, se ha descartado un daño significativo en los ligamentos, por lo que Aleix puede comenzar la recuperación rápidamente". El propio piloto matizó, eso sí, en su cuenta de Instagram, que sufría una "distensión del ligamento lateral".

Un balance que da alas al '41', en su deseo por estar presente en la cita de Assen, después de perderse este lunes el test oficial en el Circuito de Barcelona-Cataluña. Andrea Iannone y Bradley Smith, que tuvo la mala fortuna de impactar con el propio Aleix en la primera vuelta de la carrera, asumieron el mando a la hora de desarrollar la RS-GP. Pese a su lesión, Aleix volvió a acreditar su total implicación con el proyecto y no perdió la oportunidad de apoyar al constructor de Noale en el box del mismo Circuit, donde fue fotografiado junto a diversos miembros de su equipo.

El propio piloto español se confesó "aliviado porque el chequeo médico mostró una situación mejor de lo que esperábamos inicialmente". Sin embargo, el mayor de los Espargaró no dudó en lamentar su ausencia en el test. Su hoja de ruta, eso sí, está muy clara. No ve la hora de volver a subirse a la Aprilia: "Mi objetivo es comenzar la recuperación lo antes posible y acelerar mi regreso al sillín, de manera compatible con el 'feedback' de los médicos. Me dijeron que en un par de días podré volver a montar en bicicleta y estoy contando las horas", sentenció Aleix. Sin duda, se trata de una terapia muy reconfortante para un auténtico amante del ciclismo. Su particular contrarreloj para llegar a tiempo a Assen no ha hecho más que comenzar.